lunes, 22 de diciembre de 2008

Cerca de Belén


FELIZ NAVIDAD

Os deseo a todos de corazón, que paséis unas Felices y Santas Navidades.  Pasar un tiempo contemplando el misterio del Dios que se hace niño, y nuestros problemas se harán pequeños como Él. También os deseo lo mejor para el año entrante: ¡¡¡Feliz 2009!!!




FELIZ NAVIDAD

jueves, 18 de diciembre de 2008

Transparencia y supervisión, claves para evitar otra crisis subprime

Jorge Soley


La crisis subprime se inició en julio de 2007 con la suspensión de reembolsos de los fondos de Bear Stearns y, un año más tarde, sus efectos aún no se han cuantificado totalmente. El exceso de liquidez, el predominio de la transferencia de riesgos y la falta de supervisión dieron lugar a una situación insostenible que ha afectado a las entidades bancarias y a las compañías de seguro, en primer lugar, pero también a los fondos de capital privado (private equity) y, de forma indirecta, a la actividad inversora de los hedge funds, los fondos de inversión y los fondos de pensiones. En definitiva, esta crisis afecta al sector financiero en su globalidad, como explica el documento "Aspectos financieros de la crisis subprime", preparado por Jorge Soley, profesor de Dirección financiera del IESE. La gran pregunta es cómo pueden las entidades financieras plantar cara a la crisis y qué medidas podrían evitar que se repitiera. El primer paso es conocer sus orígenes.

Las causas
Esta crisis tiene su origen en las hipotecas subprime (de las que toma el nombre), las hipotecas de alto riesgo concedidas en Estados Unidos a personas con un historial crediticio de impagos, con capacidad baja o nula para financiar parte de la compra de la vivienda y bajos ingresos en relación con la deuda asumida.
Para entender cómo se ha llegado a esta situación es necesario conocer el contexto económico en el que se produce. Para ello hay que remontarse al periodo anterior a julio de 2007. Por una parte, en el mundo de la banca se puso de moda el modelo de distribución originate to distribute, basado en políticas bancarias que se desprendían inmediatamente del riesgo, al venderlo a otras entidades. Esto hizo posible globalizar los productos e incorporar nuevos inversores a través de la transmisión de riesgos. Pero también provocó que la entidad originadora del préstamo se desvinculara de la situación patrimonial del acreditado, y que el nuevo inversor comprara un título a ciegas sin conocer realmente los riesgos que conllevaba. Las entidades bancarias dejaron de lado el principio básico de la banca: la devolución del préstamo por el prestatario, que se complica cuando éste último tiene una capacidad financiera baja o nula. Además, los sistemas de remuneración de los ejecutivos bancarios priorizaban el volumen de negocio en lugar del buen fin del crédito.
En aquel momento existía además un exceso de liquidez, primas de riesgo muy reducidas, una fuerte revalorización de los inmuebles que garantizaban los préstamos hipotecarios y una búsqueda por parte de los inversores de alternativas con altas rentabilidades, que se vieron cumplidas con la aparición de complejos "productos estructurados" derivados de crédito, como los Collateralised Debt Obligations (CDO), que se comercializaban a través de los "vehículos especiales" (los Conduits y los SIV), sin supervisión bancaria. La falta de supervisión se vio agravada en muchos casos por su alto apalancamiento financiero, en contra de la ortodoxia bancaria: inversión a largo y financiación a corto plazo.
Ante la confluencia de estos hechos y la sobrevaloración de las tasas de recuperación en caso de los impagados, no es de extrañar que el castillo de naipes acabara derrumbándose. Pero, ¿cómo desemboca una crisis del sistema financiero en una crisis económica global? El mecanismo es fácil de entender: a través de los canales amplificadores (prima de riesgo, efecto negativo en los recursos propios de las entidades bancarias y la incertidumbre sistémica), que provocan la caída de la oferta crediticia y un endurecimiento de las condiciones de concesión de crédito.

El nuevo escenario financiero
Toda crisis comporta cambios y en este caso ha provocado (y provocará) una serie de modificaciones en las estrategias y políticas de las entidades financiera. Estos cambios, junto con otros factores, como la implementación de las normas prudenciales de Basilea II , las nuevas normas contables (IFRS) y el espacio común de pagos europeos (SEPA), acabarán creando un nuevo entorno bancario que muchos expertos creen que tendrá su punto de inflexión en 2010. Dado que el sector bancario supone aproximadamente un 10% del PIB mundial, estos cambios tendrán un impacto también en empresas y particulares, tanto a prestatarios como a inversores. Además, la crisis provocará cambios en los sistemas de supervisión y contabilidad, y en el papel de las agencias de rating.
El documento ofrece algunas recomendaciones. En primer lugar, debería existir mayor coordinación entre los supervisores nacionales. No puede (o no debería poder) existir una banca paralela, basada en vehículos especiales, sin supervisión y que no exija determinados coeficientes de solvencia, apunta el profesor Soley. Esto también afectará a la contabilidad, estrechamente ligada a la actividad supervisora. Cualquier decisión contable sobre los instrumentos financieros que han provocado la crisis subprime debe subordinarse a las políticas de Basilea II y no al revés. Por otra parte, debería incrementarse la homogeneidad contable entre Estados Unidos y Europa, para unificar los distintos criterios existentes.
En cuanto al papel de las agencias de rating, hay que recordar que un rating es una posibilidad, no una garantía. Sin embargo, existe un conflicto de intereses que se debería combatir, puesto que las agencias están pagadas por las emisoras, que buscan altas calificaciones, y no por los inversores. Es necesario, por tanto, mejorar muchos aspectos de su operativa, exigir transparencia en los métodos utilizados y más neutralidad en sus sistemas de remuneración.
También la banca tendrá que replantearse sus estrategias. Las entidades supervisoras señalan que el éxito de las entidades bancarias dependerá de un control de riesgos exigente, del cumplimiento normativo y de unos principios éticos y de buen gobierno, especialmente en un contexto en que cada día se valora más el riesgo reputacional. La crisis subprime ha puesto de manifiesto, aún más si cabe, la necesidad de mejorar los modos de operar y los procedimientos independientemente del modelo bancario elegido. Deben tenerse en cuenta los riesgos de crédito y también de liquidez, un factor que se ha subestimado. Se ha de volver a los orígenes: conocer bien al acreditado, estudiar a fondo los productos que se comercializan y limitar las posiciones propias de las entidades crediticias. En este sentido, resulta también clave encontrar nuevos sistemas de remuneración de los ejecutivos bancarios que no estén tan vinculados a los resultados a corto plazo.
En definitiva, es necesaria una mejora en la gestión de riesgos, en el cumplimiento normativo y en los sistemas de gobierno. "Saldrán victoriosas de la crisis aquellas entidades con una mejor gestión integral de riesgo", asegura el autor.

(fuente: web IESE)

jueves, 11 de diciembre de 2008

¿Qué puede hacer un profesional ante la crisis?



Desde hace ya algún tiempo (antes de la crisis) en los mentideros de recursos humanos hablábamos de lo cambiante del mercado laboral. 


En época de nuestros padres uno entraba en una empresa y si era trabajador podía hacer carrera, y por supuesto, se jubilaba en ella. El nivel de compromiso por las dos partes era mayor. 


Nosotros los hijos, hemos descubierto que éso ya no es así. Las empresas en sus continuos ajustes, cambios, compras, ventas,...etc. prescinden de la gente con suma facilidad. Ya hemos visto carreras de personas entregadas a la compañía que incluso han priorizado la vida de empresa, de manera permanente, frente a  compromisos familiares y cómo después de tanto sacrificio cuando la empresa ha necesitado prescindir de ellos los han echado. 


Las primeras conclusiones son claras: si quieres tener alguna iniciativa en el mercado laboral debes tener “empleabilidad”. Es decir tener un cv y competencias profesionales atractivas en el mercado, que el mercado laboral te vea como un profesional “apetecible”. 


La situación ha ido a más. ya no bastaba la empleabilidad y hablábamos de “diversificar el riesgo”: tener otra actividad que nos suponga algunos ingresillos, pero que sobre todo nos hace estar entrenados en otra actividad paralela y complementaria de tal forma que si nos encontramos con un despido, podemos seguir con ese trabajo e incluso intensificar la actividad (por lo menos mientras encontramos otro trabajo). 


El trabajo en paralelo da muchas ventajas y si uno ha pasado cierta edad (y se ve con dificultades para optar a un puesto de trabajo como el anterior) podría convertirse en su nueva actividad definitiva.


El nuevo paso de tuerca es el crearse una imagen personal, gestionar tu propia marca. Ser bueno, formarse permanentemente y darse a conocer en el mercado, intentar ser una eminencia en un tema concreto y darte a conocer. Las web 2.0 esta dando esa oportunidad a millones de personas. 


Trabajes donde trabajes no tengas mentalidad de “funcionario o semifuncionario”, ya nadie tiene el puesto en propiedad. Ten mentalidad de profesional independiente, hoy puedes estar prestando tus servicios con la máxima profesionalidad y lealtad en una empresa, pero como experto mañana puedes estar en otra. Lidera tu trayectoria profesional, impide que la dirijan causas externas a ti.


Ésta es una acción concreta que recomiendo hacer sobre todo....en tiempos de crisis.



jueves, 4 de diciembre de 2008

¿miedo a la crisis?


No hay nada en esta vida como observar los indicadores precisos para saber por donde van los tiros:


¿Tenemos algo peor que la inflación?, Sí la deflación. La inflación en la zona euro es de 2,1% y esta es posible que baje al 1% en los próximos meses. Añadamos la situación de que el crédito a empresas y consumidores esta cortado y la financiación interbancaria inexistente (ni entre los bancos se fían de la situación del compañero).


El empleo: en España tenemos ya 3 millones de desempleados (tasa de paro de 13 % la mas alta de la unión europea), y añadamos a este dato la destrucción de puestos de trabajo (descenso de la afiliación a la seguridad social).


¿qué te hace pensar que esta economía no es segura? 





miércoles, 3 de diciembre de 2008

¿Tienen las escuelas de negocio alguna responsabilidad sobre la crisis?



En el Blog “aceite de roca” de mi amigo Julio he leído este post, escrito el 19 de noviembre (aparece íntegro a continuación, bajo el título Integridad). 

(http://aceitederoca.blogspot.com/2008/11/integridad.html)



Integridad


El titulo es pomposo, lo se, pero ayer me invitaron a hablar en el IESE dentro del Global Collaboration Conference de la European Foundation for Management Development?(http://www.efmd.org/) sobre "The Needs and Trends of the companies" y allí que me fui y provoqué cierto debate sobre la necesidad de que los alumnos tengan Integridad....


Mike Rosemberg (http://wwwapp.iese.edu/faculty/facultyDetail.asp?lang=cat&prof=MRO) me preguntaba que cómo se enseña eso de la Integridad....


Otro profesor, de la universidad de Denver, preguntaba que ellos pueden dar ética pero no garantizar el comportamiento ético de sus alumnos.


Es evidente que la integridad es una responsabilidad personal, que cada uno la ejerce con su libérrima actuación, pero mi pregunta va al proceso ( y por tanto a la cuenta de resultados) de las admisiones de las escuelas de negocios. ¿Puede en el proceso de admisión valorarse, medirse, estimarse los valores éticos antes de admitir a los aspirantes en sus programas?.


Yo creo que las escuelas de negocio pueden y deben fajarse en la selección de aspirantes que a la larga "no salgan rana" (que alguno habrá), que sean personas de principios (y si no les gusta tengo otros, que diría Marx) y valores.


Estamos viendo como la codicia ha tumbado el sistema capitalista (que seguramente tenga una mala salud de hierro), como antes fueron Enron y demás...


Si las escuelas de Negocios quieren formar líderes deberán formarlos (no exponer, enseñar) a servir a la comunidad con integridad, y eso pasa por una muy buena selección.


Y como dijo mi buen amigo D. Jacinto Lázaro. "La gente mejora o empeora pero cambiar, cambiar, no cambia"



 Julio, me parece genial y abre un debate sobre las escuelas de negocios que me parece necesario y urgente. ¿Qué tipo de alumno está saliendo de las escuelas de negocios? ¿los directivos de Enrom, de Worlcom, de la banca financiera,...etc? La alta dirección se forja en las mejores escuelas de negocios del mundo. Salen con grandes conocimientos sobre estrategia, entorno económico, marketing, finanzas, ¿pero, con qué valores? y ¿saben algo de ética?, ¿han oído hablar del bien común aplicado a las organizaciones empresariales? sí ya sabemos que las empresas tienen como uno de sus principales objetivos obtener beneficios, pero ya se ve que sin ética . La obtención de riquezas se hace de tal forma que nos lleva a la quiebra y la crisis mundial ¿se ha parado algún gurú a pensar y reflexionar sobre ésto?


Los estilos directivos actuales, los criterios de decisión actuales, nos han llevado a donde estamos, ¿quiere alguien hablar siquiera de ello? ¿hay quiebra de la confianza? pero es que ¿es posible recuperarla sin ética?.

Es curioso pero no oigo ni leo casi hablar de la crisis en estos términos...es curioso...


martes, 2 de diciembre de 2008

¿Nos hemos vuelto todos lowcost?

Os inserto este post de Andrés Pérez Ortega que me parece interesante en los tiempos que corren (http://www.marcapropia.net/blog.html)





En julio del año pasado, Z anunció, entre otras cosas, que durante esta legislatura España alcanzaría el pleno empleo

Sin comentarios.


En este momento, los despidos, EREs y otras hierbas están a la orden del día. De pronto hay mucha más oferta que demanda de profesionales.

¿Que podemos hacer? 

Pues nada que no esté inventado ya. Basicamente podemos posicionarnos en precio o elaborar una estrategia de diferenciación.


Desde mis tiempos en el mundo de las compras, creo que la estrategia de precio es un callejón sin salida. Siempre vas a encontrar alguien que por desesperación o por eliminarte del mercado sea más barato que tu. Si eso ocurre con los productos, imagínate lo que ocurre con el trabajo de las personas. Y más en esta situación.





En el mercado laboral, creo que es más necesario que nunca elaborar una estrategia de posicionamiento personal/profesional basada en la diferenciación y en la calidad de tu trabajo.


Creo que una Marca Personal debe ser percibida como valiosa y la estrategia de reducción de precios me parece arriesgada por muy tentadora que parezca.


Es muy posible que para sobrevivir debamos aceptar trabajos alimenticios o hacer alguna excepción que influya en el precio (salario, nómina o tarifa) de nuestra "oferta profesional", pero esta debería ser la excepción y no la regla.


Antes o después esta crisis pasará y debemos empezar ahora mismo a elaborar una estrategia de posicionamiento de Marca Personal que nos ayude a ser percibidos como los profesionales de referencia en nuestro "nicho". Si no lo hacemos así, pronto todos seremos profesionales "low-cost", con todo lo que eso implica.


Fuente: Andrés Pérez Ortega http://www.marcapropia.net/blog.html

lunes, 1 de diciembre de 2008

La crisis, ¿sacaremos algo bueno?


Estamos todos preocupados por la crisis, y desde luego no es para menos. EL 23 y 24 de Octubre tuve el honor de asistir al “IESE global Alumni Reunión” Titulado: “The New Dynamics of Global Business”.


Como siempre los ex alumnos disfrutamos reencontrándonos y oyendo las conferencias magistrales de ponentes de excepción: Javier Monzón (presidente de Indra), José Ignacio Goirigolzarri (Presidente y director de operaciones del BBVA), José Manuel González-Páramo (Miembro del Comité ejecutivo de Banco Central Europeo), Rafael del Pino (Presidente Ejecutivo de Ferrovial), Nick Earle (Vicepresidente Sénior, Cisco Services, Mercados Europeos), Michel Candessus (Gobernador Honorario de Bamque de France), Janne Haaland Matlary (profesora de la universidad de Oslo y ex secretaria de Estado de Asuntos Exteriores de Noruega), profesores del IESE, ...etc. Pero quizá el que más me llamo la atención fue Nouril Roubini, profesor de la Leonard N. Stern School of Business, New York University. 


Nouril Roubini es un experto conocido mundialmente en el campo de la macroeconomía internacional. Fue alto asesor, del Consejo de la Casa Blanca de asesores económicos y del departamento del Tesoro de Estados Unidos. Decía que me llamo la atención cuando hablando de la crisis predijo que no dibujaría una curva en “V” ni en “U”. Sería más bien una curva en “L”. Vino    a decir que pasaremos un crisis larga (entorno a cinco años). Dibujo una realidad dramática, salimos un poco tocados. Tanto fue así que Jordi Canals (Director General de IESE y prof. de Economía y Dirección Estratégica) en el acto de clausura tubo que resaltar el optimismo y la esperanza en una buena y pronta salida de la situación nacional e internacional.


Cuando consulté al Catedrático de Economía y Profesor de Economía del Instituto de Empresa, Don Rafael Pampillón me dijo que Nouril Roubini ya había predicho lo que esta pasando en la economía mundial. 


En fin... que parece que nos cae una buena...pero alguien me dijo hace tiempo que si se es listo se puede sacar mucho bien de malas situaciones:


Desde mi humilde punto de vista (y como ya he comentado en algún otro momento en este blog) esta crisis tiene diferentes causas, pero una de ellas tiene que ver con las decisiones tomadas por los líderes de la banca mundial (luego cada país tiene además su especial situación, por ejemplo, en España un modelo de crecimiento basado en el sector inmobiliario que ya se veía agotado hace unos años).


Quizá recapacitemos y veamos que los modelos de liderazgo actuales sólo no han llevado a Enrom, Wordcom, y la crisis actual. Quizá las empresas se replanteen los liderazgos visionarios y carismáticos y opten por un liderazgo ético. Personas trabajadoras, normales, no grandes gurús. Personas que ponen cariño en lo que hacen y especial atención en las consecuencias de sus decisiones. Liderazgos no con una visión “cortoplacista” de enriquecimiento rápido y a costa de lo que sea. Liderazgos que sean capaces de generar riquezas de manera sostenida, teniendo en cuenta el desarrollo de sus empleados, queriendo que se sientan orgullosos de trabajar en la empresa, clientes fieles por que confían en el servicio que se les presta y que en último caso no se les quiere depredar a la primera de cambio. En definitiva que se aporte valor a todos lo stakeholders de manera equilibrada y sensata. No se trata de refundar nada,... “es la hora de la ética empresarial”.